Si bien perros y gatos fisiológicamente son iguales, tienen conductas distintas, formas de vida diferentes y formas de consumo de su alimento muy distintas unos con otros.
Si en casa tienes un perro y gato, te habrás dado cuenta de que la forma de alimentarse de ambos es muy distinta, siempre decimos que los gatos son mañosos, pero no es así, la realidad es que los gatos saben comer, y acá te explicamos qué queremos decir con esto:
1.- Los perros por lo general al momento de recibir su alimento diario, tienden a dar dos o tres masticadas y luego tragar, incluso si hay mas de un perro en el hogar, la velocidad de comer es más rápida aún, donde incluso se llegan a atorar comiendo; en cambio un gato, es todo lo contrario, ellos se acercan a su plato, huelen, prueban e inician su banquete, comiendo pequeños bocados, mascándolos, saboreándolos y tragando lentamente.
2.- Un perro por lo general come su plato completo cada vez que le das de comer, un gato es muy raro que se coma su plato completo, por lo general ellos comen muchas veces el día del alimento que esta en su plato; cuando recién está servido, les apetece mucho más que cuando ya llega la tarde y esto pasa porque ese alimento al estar expuesto ya no tiene el mismo olor, sabor y por sobre todo crocancia como cuando recién lo ofreciste.
3.- Es muy importante que el alimento que das a tu mascota se conserve en el envase original si tiene algún tipo de cierre hermético, como los alimentos de Animal Planet Nutribalance formato menor o bien en algún recipiente que pueda mantener la frescura del alimento.
4.- Cuando quieres regalonear a tu mascota, puedes darles distintos productos, como los sobres de pechuga de pollo de Animal Planet Nutribalance, que además de ser ricos, son saludables por el tipo de proteína que tienen, pero ojo, que a un perro le puedes dar este producto acompañado del alimento seco y no tendrá ningún problema en comerlo, ya que devorará su plato, mientras que como aprendimos anteriormente, el gato come a raciones pequeñas, por lo tanto, si mezclas su alimento seco con húmedo, él irá feliz a comer, lo disfrutará mucho, pero cuando vuelva más rato ya no lo querrá, debido que los bocados secos se pusieron esponjosos y remojados y eso a la mayoría de los gatos no les gusta nada.
Entonces, como recomendación, alimenta de manera tranquila a tu perro, dos o tres veces al día, mientras que a tu gato, dale muy pequeñas raciones diarias, ojalá cada vez que tú puedas, no le dejes el alimento sobre su plato y si quieres, prémialo con un alimento húmedo, dáselo solo o vierte el producto húmedo con muy poquita comida seca.
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